El Acueducto de Segovia es una extraordinaria obra de ingeniería romana en la que la utilidad convive con la armonía y la belleza. Data del siglo II d.C. y cumplió con su función de llevar agua a la ciudad hasta 1973 a lo largo de sus más de 13.000 metros de longitud.
Número total de arcos: el acueducto de Segovia cuenta con 167 arcos que se apoyan en 120 pilares. Para su construcción se usaron 20.400 sillares de granito. Caudal máximo: se estima que podía (y puede llevar) entre 20 y 30 litros por segundo. Esto es gracias a que su canal tiene unas dimensiones de 25x30x30 cm.
Sus 20.400 bloques de piedra no están unidos por masa ni cemento alguno, y se mantienen en un perfecto y sólido equilibrio de fuerzas. La altura máxima de la construcción se alcanza en la Plaza del Azoguejo con 28,10 m de altura y un total de 167 arcos.
El acueducto muestra la precisión y durabilidad de las técnicas de construcción de la ingeniería romana en España.